Un trabajador de Supra Caracas, identificado Junior Antonio Aguilar Graterol (27), murió tras sostener un presunto enfrentamiento con comisiones de la Policía Nacional Bolivariana, en el sector Telares de Palo Grande, en la parroquia Ruíz Pineda, la mañana de este martes.
Su padre, Isidro Aguilar, desmintió esta versión que ofrecieron las autoridades, alegando que el joven no tenía problemas con la justicia. El día en que lo hirieron los policías, fue ingresado al hospital Miguel Pérez Carreño, donde su padre vende café en la entrada, pero nunca se supo que era su hijo el fallecido.
Contó que Aguilar salía todas las mañanas de su casa en Sarría, rumbo a la empresa de desechos sólidos ubicada en La Yaguara. Al salir de su empleo, pasaba a saludar a sus padres en la residencia de estos en Antímano, pero el martes no fue y eso les preocupó.
Isidro Aguilar contó que esa tarde él llegó tarde al hospital para instalarse en su puesto informal al vender café. Supo que ingresaron a un tiroteado, pero no indagó al respecto cuando le dijeron que era un delincuente que había matado la policía.
Más tarde, lo llamaron para notificarle que el joven no aparecía, así que se marchó para sumarse a la búsqueda. Acudieron al Cicpc pero no pudieron denunciar la desaparición y poco después los llamaron del hospital para decirles que el muchacho estaba muerto. El joven tenía una moto que no aparece. Dejó dos hijos.